Las reservas de divisas del gobierno japonés disminuyeron en alrededor de 7,4 billones de yenes en mayo en comparación con finales de abril. Se cree que la intervención cambiaria del gobierno japonés y el Banco de Japón es la principal causa de esto.

Según el Ministerio de Finanzas, las reservas de divisas a finales de mayo fueron de 1.231.500 millones de dólares (alrededor de 193 billones de yenes), lo que representa una disminución de 47.400 millones de dólares (alrededor de 7,4 billones de yenes) con respecto a finales de abril. Esto se debe a la intervención cambiaria de 9,788.500 millones de yenes que el gobierno japonés anunció recientemente entre abril y mayo. La disminución es la segunda más grande de la historia, después de la gran intervención de venta de dólares y compra de yenes en septiembre de 2022.

En particular, la disminución en los valores fue significativa. Las tenencias de valores a finales de mayo fueron de 927.500 millones de dólares (alrededor de 145 billones de yenes), lo que representa una disminución de 50.400 millones de dólares (alrededor de 7,9 billones de yenes) con respecto al mes anterior. Esta es la mayor disminución de la historia.

Por otro lado, también se están expresando preocupaciones sobre la política de reservas de divisas del gobierno japonés. El Instituto de Investigación Integral de Japón señaló recientemente en un informe que "la política de reservas de divisas del gobierno japonés podría poner en riesgo las operaciones fiscales de Japón en el futuro". El informe explicó que "a medida que el tamaño de las reservas de divisas de Japón ha aumentado a los niveles más altos del mundo, puede estar más expuesto a los riesgos de mercado, como las fluctuaciones cambiarias o las fluctuaciones de las tasas de interés".

Se está pidiendo al gobierno japonés que reconsidere su política de reservas de divisas y que ajuste el tamaño de sus reservas de divisas vendiendo activos en moneda extranjera.