Las agencias de inteligencia de los “Cinco Ojos” (alianza de intercambio de información de Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Australia y Nueva Zelanda) advirtieron el 5 de diciembre (hora local) que China está reclutando agresivamente a exmilitares y militares occidentales para fortalecer su poder militar. China está reclutando especialmente a pilotos y técnicos de combate, y en este proceso está utilizando empresas privadas extranjeras para ocultar su conexión con China.

El Centro Nacional de Contraterrorismo y Seguridad Nacional (NCSC), que forma parte de la Oficina Nacional de Inteligencia de Estados Unidos (DNI), publicó una advertencia conjunta de los Cinco Ojos ese día, diciendo que “los esfuerzos de China para emplear a exmilitares y militares occidentales para entrenar al ejército chino están evolucionando”. El director del NCSC, Michael Casey, dijo en un comunicado: “El Ejército Popular de Liberación de China está reclutando activamente a personal de las fuerzas armadas occidentales para superar sus debilidades y entrenar a los pilotos, entre otras cosas”. Añadió: “La declaración de hoy con nuestros socios de los Cinco Ojos expone esta amenaza continua y tiene como objetivo evitar que los exmilitares y militares occidentales pongan en peligro a sus compañeros y debiliten la seguridad nacional”.

Las autoridades estadounidenses han argumentado durante mucho tiempo que China ha robado tecnología estadounidense para construir aviones de combate de última generación, pero que su experiencia en el pilotaje de aviones de combate no está a la altura de los avances. Sin embargo, según el New York Times (NYT), altos funcionarios estadounidenses temen que China pueda fortalecer su poder aéreo reclutando activamente a pilotos occidentales. El Financial Times (FT) señaló: “China también busca obtener conocimientos sobre los aviones de combate y las tácticas aéreas de vanguardia de Occidente a través de la contratación de pilotos occidentales como parte de su entrenamiento”, y agregó: “Por ejemplo, están viendo tácticas occidentales sobre el espacio aéreo de Taiwán”.

Según el NCSC, China está utilizando empresas privadas para reclutar a militares occidentales, y estas empresas ofrecen grandes sumas de dinero a los militares ocultando su relación con China. Los reclutadores utilizan correos electrónicos de búsqueda de personal, plataformas de contratación online, etc. Un alto funcionario estadounidense con conocimiento del caso dijo a Reuters: “Algunos pilotos occidentales están aceptando esta oferta, atraídos por la gran cantidad de dinero y la tentación de pilotar aviones de combate de última generación chinos”.

En septiembre del año pasado, el entonces presidente del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos, Charles Brown, expresó su preocupación por el hecho de que “algunas empresas extranjeras que hacen negocios con el gobierno chino están contratando a personal militar de diversas especialidades que han sido entrenados en Estados Unidos y la OTAN”. También señaló: “El personal militar retirado de Estados Unidos reclutado por empresas privadas que tienen relaciones con el gobierno chino está desempeñando funciones como el entrenamiento de instructores militares chinos”, y agregó: “Están socavando la seguridad nacional de Estados Unidos y poniendo en peligro la seguridad de los miembros de las fuerzas armadas estadounidenses y de la nación”.

El hecho de que China esté reclutando a militares occidentales salió a la luz en septiembre del año pasado, cuando se reveló que la “Test Flying Academy of South Africa (TFASA)” había contratado a más de 20 ex pilotos de combate de la Fuerza Aérea, la Marina y el Ejército del Reino Unido para ayudar a entrenar a los pilotos del Ejército Popular de Liberación de China. Tras ello, el Departamento de Comercio de Estados Unidos impuso sanciones a China y a entidades de Kenia, Laos, Malasia, Singapur, Sudáfrica y Tailandia que reclutan a exmilitares y militares estadounidenses. Además, el Reino Unido modificó su Ley de Seguridad Nacional para poder procesar a los ex pilotos que hayan compartido información militar confidencial con terceros.