Industria automotriz japonesa sacudida por una serie de irregularidades en certificaciones: Toyota detiene la producción y los envíos

Toyota Motor anunció el 6 de junio que suspenderá la producción de tres modelos, el 'Yaris Cross', el 'Corolla Fielder' y el 'Corolla Axio', debido a irregularidades en la certificación de especificaciones necesarias para la producción de vehículos. La compañía planea detener la producción al menos hasta finales de este mes, cuando concluya la investigación en curso, y luego considerar la reanudación una vez que el Ministerio de Tierra, Infraestructura, Transporte y Turismo levante la orden de suspensión de envíos. Los tres modelos cuya producción se suspenderá tienen una producción anual de aproximadamente 130.000 unidades, y su fabricación está a cargo de dos líneas de producción de dos plantas de Toyota Motor East Japan, una ubicada en Ōhira-mura, prefectura de Miyagi, y la otra en Kanegasaki-machi, prefectura de Iwate. El Yaris Cross es un SUV compacto que se vende principalmente en el mercado nacional japonés, aunque también se comercializa en algunos mercados extranjeros. Los otros dos modelos presentaron irregularidades en la verificación de las lesiones en la cabeza de los peatones en caso de colisión.

Esta situación se deriva de una serie de casos de irregularidades en las certificaciones que se han producido desde 2022 en empresas como Hino Motors, Toyota Auto Body y Daihatsu Motor, lo que llevó al Ministerio de Tierra, Infraestructura, Transporte y Turismo a ordenar a varias empresas que investigaran si existían casos similares. Como resultado, cinco empresas, Toyota Motor, Mazda, Yamaha Motor, Honda y Suzuki, informaron de irregularidades en las pruebas de rendimiento de sus vehículos.

En el caso de Toyota, se detectaron irregularidades como la presentación de datos falsos en las pruebas de protección de la cabeza de los peatones en caso de colisión en siete modelos. Mazda admitió haber manipulado arbitrariamente el software de control en las pruebas de potencia del motor en cinco modelos. Yamaha confirmó que realizó pruebas de ruido en condiciones inapropiadas en tres modelos. Honda reconoció la falsificación de los resultados de las pruebas de ruido en 22 modelos, y Suzuki admitió haber falsificado los resultados de las pruebas de frenos en un modelo.

El Ministerio de Tierra, Infraestructura, Transporte y Turismo ha ordenado a las tres empresas en las que se han detectado irregularidades en modelos actualmente en producción, Toyota, Mazda y Yamaha, que suspendan los envíos de los modelos en los que se detectaron las irregularidades hasta que se pueda verificar si cumplen con los estándares nacionales. La suspensión de envíos afecta a tres modelos de Toyota, dos de Mazda y uno de Yamaha. El Ministerio tiene previsto llevar a cabo inspecciones in situ en las cinco empresas para confirmar los hechos.

Toyota Motor ha suspendido los envíos y las ventas de los tres modelos que actualmente se están produciendo, el 'Corolla Fielder', el 'Corolla Axio' y el 'Yaris Cross', en cumplimiento de la orden del Ministerio de Tierra, Infraestructura, Transporte y Turismo. Toyota declaró: "Pedimos disculpas sinceras por las preocupaciones y molestias causadas a nuestros clientes y partes interesadas que han confiado en Toyota. Al igual que en el caso de Hino Motors, Daihatsu Motor y Toyota Auto Body, donde se produjeron problemas con la certificación, tomamos muy en serio el hecho de que también se haya producido un problema en Toyota".

Toyota declaró que ha confirmado que todos los modelos en los que se produjeron irregularidades no presentan problemas de rendimiento, pero que, no obstante, ha decidido suspender los envíos y las ventas de los tres modelos actualmente en producción a partir del 3 de junio. El presidente de Toyota Motor, Akio Toyoda, explicó en una conferencia de prensa: "Cometimos un error en nuestro enfoque del problema de la certificación. Si esto no se resuelve, no podremos iniciar la producción en serie. Y dado que no podemos iniciar la producción en serie, hemos tenido que detener las líneas de producción". También afirmó: "Cooperaremos plenamente con las autoridades y haremos todo lo posible para obtener la aprobación lo antes posible y reanudar la producción".

Este incidente ha tenido un gran impacto en la fiabilidad de la industria automovilística japonesa en general. En el futuro, cada empresa deberá establecer medidas exhaustivas para evitar que se repitan las irregularidades en la certificación y esforzarse por recuperar la confianza de los consumidores.