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La era de la conducción autónoma, Japón espera que los camiones se comercialicen antes que los taxis
- Idioma de escritura: Coreano
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- País de referencia: Japón
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Texto resumido por la IA durumis
- Si bien Japón aún se está quedando atrás en la comercialización de taxis autónomos, está acelerando el desarrollo de varios medios de transporte que utilizan tecnología de conducción autónoma, y en particular, está trabajando en la comercialización de camiones autónomos.
- A partir de 2024, comenzará las pruebas de campo del taxi autónomo 'Cruise Origin' en Tokio, y planea comenzar un servicio comercial a principios de 2026. En 2026, implementará camiones autónomos de nivel 4 y planea su difusión en la década de 2030.
- Sin embargo, la comercialización de la tecnología de conducción autónoma presenta muchos desafíos que deben resolverse, como el establecimiento de un sistema de gestión de operaciones, la mejora de la infraestructura y la determinación de la responsabilidad en caso de accidentes. Japón deberá acelerar la comercialización de la tecnología de conducción autónoma para mantenerse al ritmo del desarrollo tecnológico mundial.
Aunque los servicios de taxis autónomos ya se han puesto en marcha en las principales ciudades del mundo, Japón aún no ha visto la comercialización generalizada de taxis autónomos. Sin embargo, el gobierno japonés y las empresas están trabajando arduamente para desarrollar diversos medios de transporte que utilicen la tecnología de conducción autónoma, y están centrando sus esfuerzos especialmente en la comercialización de camiones autónomos.
En la exposición 'Japan Mobility Show 2023', celebrada en Tokio en octubre de 2023, el taxi autónomo 'Cruise Origin', desarrollado conjuntamente por Honda, GM y Cruise, atrajo mucha atención. Este vehículo es un taxi completamente sin conductor que corresponde al nivel 4 de conducción autónoma, y se planea que comience a ofrecer servicios comerciales en Tokio a principios de 2026 tras realizar pruebas de campo a partir de 2024.
Por otro lado, en Estados Unidos, Waymo, una filial de Google, ha comercializado taxis autónomos en Phoenix desde 2018, y posteriormente también ha ofrecido servicios en San Francisco, Los Ángeles, Austin y otras ciudades. Baidu, una empresa china, también ha comercializado taxis autónomos en Chongqing y Wuhan en agosto de 2022. Sin embargo, también están aumentando las voces de preocupación sobre estos servicios de taxis autónomos.
En octubre de 2023, un taxi autónomo de Cruise chocó con un peatón en San Francisco. Como resultado, las autoridades de California suspendieron las operaciones de Cruise y la conducción autónoma sin conductor, y Cruise también suspendió la operación de vehículos sin conductor en todo el país. Sin embargo, la opinión generalizada es que, en lugar de negar la tecnología de conducción autónoma en sí, se debe mejorar la seguridad mediante la acumulación continua de datos y la mejora del software.
En Japón, también se están acelerando los esfuerzos para la comercialización de la tecnología de conducción autónoma. Se han puesto en marcha pequeños servicios de transporte autónomo en la ciudad de Eiheiji, en la prefectura de Fukui, y el gobierno está promoviendo el 'Proyecto de investigación y desarrollo de servicios de movilidad avanzados, incluyendo la conducción autónoma de nivel 4, e implementación social'. En particular, se está centrando en la comercialización de camiones autónomos en autopistas, y se planea que los camiones autónomos de nivel 4 se pongan en marcha en 2026 y se generalicen en la década de 2030.
Parece que la introducción de camiones autónomos, que pueden resolver el problema de la escasez de conductores, se llevará a cabo antes que los taxis. Sin embargo, todavía hay muchos desafíos que deben abordarse, como el establecimiento de sistemas de gestión de operaciones, la mejora de la infraestructura y la determinación de la responsabilidad en caso de accidentes. Es probable que las empresas japonesas deban acelerar sus esfuerzos para la comercialización de la tecnología de conducción autónoma para seguir el ritmo del progreso tecnológico mundial.